Las exportaciones de banano de Colombia cayeron un 8,5% en 2022

La Asociación de Bananeros de Colombia (Augura) presentó el balance de su actividad durante 2022, periodo en el que se observó una caída considerable en la productividad por motivos climatológicos. “Los datos estadísticos de alta pluviosidad y bajo brillo solar que se dieron en Urabá no se habían presentado nunca antes, desde que se llevan registros climatológicos, lo que ocasionó una sensible disminución del volumen de cajas exportadas, del 8,5%, comparada con el año 2021”, anotó el presidente de la junta directiva del gremio, Jaime Henríquez Gallo.

Las exportaciones sumaron 891 millones de dólares después de que la productividad bajara de 2.124 cajas por hectárea en 2021 a 2.027. A ello se sumó la caída de los precios de la fruta en los mercados internacionales, que fue otra variable que golpeó muy duro al sector; principalmente en el mercado europeo.

Y es que la guerra entre Rusia y Ucrania ocasionó el cierre de las fronteras rusa y ucraniana a la fruta ecuatoriana, que tradicionalmente abastece esos mercados, causando su desplazamiento a otros destinos europeos, lo que generó la sobreoferta y el desplome de los precios. Asimismo, el conflicto bélico, provocó el incremento de los fletes marítimos y del costo de los fertilizantes utilizados en el cultivo del banano, principalmente la urea, disminuyendo aún más el margen de ganancia de productores y comercializadoras.

“Hoy solo nos queda esperar que la corrección a la baja de los costos, que ya empezamos a registrar, retome la estabilidad requerida. Igualmente, esperamos la normalización de los mercados y su regreso a la tradicional oferta y demanda, algo que afortunadamente ya empezó a evidenciarse en este 2023”, añadió Henríquez.

Cabe destacar, no obstante, que, a pesar de la crisis, de todas las dificultades del año anterior y de los problemas económicos que padecieron las empresas de la industria bananera, se logró garantizar la estabilidad laboral a los 42.000 empleos permanentes que genera la actividad en el Urabá antioqueño, Magdalena y La Guajira, al igual que a los 108.000 empleos indirectos que le sirven de soporte, todo en beneficio de las 150.000 familias que dependen económicamente de esta actividad.

 

Source: www.freshplaza.es